Cap�tulo 8
La Fiesta De Los Tabern�culos

"Habla a los hijos de Israel y diles: A los quince d�as de este mes s�ptimo ser� la fiesta solemne de los tabern�culos a Jehov� por siete d�as" (Lv 23:34).

A. LOS ASPECTOS HIST�RICOS Y PROF�TICOS
Como usted sabe, nuestro Antiguo Testamento fue escrito originalmente en el idioma hebreo. Los traductores tuvieron grandes dificultades tratando de extraer conceptos de este lenguaje antiguo a los lenguajes modernos.

Esto es cierto cuando tomamos el t�rmino cukkah (pronunciado su-co), del cual se tradujo la palabra "tabern�culos". Esto se pod�a traducir como refugio, pabell�n, tabern�culo o tienda.

1. El Uso De Refugios Temporales
Durante el Festival de los Tabern�culos, los refugios temporales (o caba�as) hechos de ramas de �rboles, eran erigidos sobre los techos planos o en las calles.

A�n hoy en d�a, si usted va a Israel durante la Fiesta de los Tabern�culos, ver� esos refugios temporales erigidos por todos los alrededores de Jerusal�n.

Quiz�s esta fiesta es mejor descrita en Nehem�as. "… Jehov� hab�a mandado por mano de Mois�s, que habitasen los hijos de Israel en tabern�culos en la fiesta solemne del mes s�ptimo.

Y que hiciesen saber, y pasar preg�n por todas sus ciudades y por Jerusal�n, diciendo: Salid al monte, y traed ramas de olivo, de olivo silvestre, de array�n, de palmeras y de todo �rbol frondoso, para hacer tabern�culos, como est� escrito.

Sali�, pues, el pueblo, y trajeron ramas e hicieron tabern�culos, cada uno sobre su terrado, en sus patios, en los patios de la casa de Dios, en la plaza de la puerta de las Aguas, y en la plaza de la puerta de Efra�n.

Y toda la congregaci�n que volvi� de la cautividad hizo tabern�culos, y en tabern�culos habit�; porque desde los d�as de Josu� hijo de Nun hasta aquel d�a, no hab�an hecho as� los hijos de Israel. Y hubo alegr�a muy grande" (Neh 8:14-17). Este proceso no hab�a sido practicado desde el tiempo de Josu�.

Esta fiesta era un recordatorio a Israel de los d�as en los que moraban en tiendas en el desierto.

2. Una Gran Cosecha Futura
Esta fiesta tambi�n era llamada la Fiesta de la Cosecha (Ex 23:16). Se le llam� as� porque ocurr�a en Octubre, despu�s que todas las cosechas hab�an sido recogidas. Era un Festival de la Gran Cosecha.

Para nosotros los que hoy vivimos en los d�as finales de la era de la Iglesia, esto tiene gran importancia. Tal vez recuerde que Jes�s dijo: "…la siega es el fin del siglo" (Mt 13:39).

Esto implica claramente que los Tabern�culos representan el cumplimiento o gran conclusi�n de los planes de Dios para la historia humana como nosotros la conocemos.

Este ser� un tiempo de una Gran Cosecha (Siega), ser� tan enorme, que no podremos contenerla con los m�todos tradicionales usados en generaciones pasadas.

B. RETORNO AL MODELO DE LA IGLESIA DEL NUEVO TESTAMENTO
Espec�ficamente tendremos que abandonar el "Concepto de las Catedrales" de las iglesias occidentales y regresar a los refugios temporales al estilo del Nuevo Testamento. (Para mas discusi�n sobre este importante concepto, vea la Secci�n E3, titulada: Rompiendo La Barrera Babil�nica.)

Durante la Fiesta de los Tabern�culos, las personas viv�an en caba�as temporales como peregrinos, quienes no ten�an un lugar de residencia permanente. El mundo no es nuestro hogar. Vamos de pasada a trav�s de esta tierra, de camino hacia nuestro hogar Celestial.
La Iglesia en China ha descubierto esta verdad din�mica. Dios la ha bendecido por ello. El gobierno les ha quitado la mayor�a de sus catedrales (templos) y han sido utilizadas para otras cosas.

Por consiguiente, �qu� han hecho los creyentes en China? Ellos han regresado al modelo que puede operar en el Tiempo de la Cosecha: cuando millones de personas se est�n volviendo a Cristo.

Este modelo es seguido en la mayor�a de los pa�ses donde se est� recogiendo una gran Cosecha. Entre ellos est�n Brasil, Chile, Corea y China.

1. �Cu�l Es Ese Modelo?
Una historia ilustrar� el concepto. Un evangelista de los Estados Unidos de Norteam�rica, lleg� al pa�s africano de Ghana en 1959. En aquel tiempo, la mayor�a de las iglesias eran peque�as. A�os de actividad misionera hab�an producido en la naci�n s�lo una comunidad de creyentes relativamente peque�a.

Este evangelista hab�a ministrado como un Felipe en la Biblia. "Entonces Felipe, descendiendo a la ciudad de Samaria, les predicaba a Cristo.

Y la gente, un�nime, escuchaba atentamente las cosas que dec�a Felipe, oyendo y viendo las se�ales que hac�a.

Porque de muchos que ten�an esp�ritus inmundos, sal�an �stos dando grandes voces; y muchos paral�ticos y cojos eran sanados; as� que hab�a gran gozo en aquella ciudad" (Hch 8:5-8).

Como resultado de un evangelismo de poder como el descrito en el p�rrafo anterior, m�s de 150 mil personas asist�an a los servicios en Ghana. De �stos, unos 25 mil recib�an a Jes�s como su Se�or y Salvador cada semana, y as� nac�an de nuevo.

Hab�a un ap�stol en Ghana quien entendi� inmediatamente que se deber�a hacer algo r�pidamente para conservar la Cosecha. De otra manera, las almas podr�an perderse de nuevo.

�l se dirigi� al evangelista y comparti� sus preocupaciones con �l. La cruzada evangel�stica se extender�a por diez semanas, 25 mil almas se estaban convirtiendo a Cristo y creyendo en �l para salvaci�n. Al final de las diez semanas, hab�a 250 mil nuevos creyentes, quienes necesitar�an a alguien que cuidara de ellos como "reci�n nacidos en Cristo" (1 P 2:2).

As� como los ni�os naturales necesitan del cuidado de una madre, de igual manera los ni�os reci�n nacidos del esp�ritu necesitan ser alimentados y cuidados. El Ap�stol Pablo describi� esta experiencia con sus conversos en Tesal�nica como sigue: "Antes fuimos tiernos entre vosotros, como la nodriza que cuida con ternura a sus propios hijos" (1 Ts 2:7).

Por consiguiente, el evangelista le pregunt� al ap�stol: "�Qu� haremos?" Yo consigo que se salven y que sean sanados, pero no s� qu� hacer con ellos despu�s de eso. No puedo permanecer aqu�, tengo grandes cruzadas planeadas en muchas otras naciones.

a. Una Mirada Al Nuevo Testamento. El ap�stol dijo: "Haremos lo que Pablo hizo en los tiempos b�blicos. Tendremos que comenzar a entrenar l�deres locales en las iglesias inmediatamente, quienes puedan continuar ministrando a esos nuevos beb�s en Cristo despu�s que el evangelista se vaya".

Mantenga en mente lo que dice la Biblia acerca de la Iglesia: "Sois… miembros de la familia de Dios, edificados sobre el fundamento de los ap�stoles y profetas…" (Ef 2:19, 20).

�Qu� significa eso? A fin de averiguarlo, regresemos por un momento al tiempo del evangelista Felipe en Samaria.

1) Los Ap�stoles En Samaria. Despu�s que Felipe consigui� que los samaritanos creyeran en Jes�s y se bautizaran en agua (Hch 8:12-17), los ap�stoles de Jerusal�n fueron inmediatamente a Samaria para establecerlos en la comuni�n entre unos y otros, y para que recibieran el bautismo del Esp�ritu Santo. De esa manera, las iglesias eran edificadas sobre "el fundamento de los ap�stoles y profetas".

Este m�todo fue seguido a trav�s de todo el Libro de los Hechos (lea Hechos 11:19-27).

2) Los Ap�stoles En Antioqu�a. As� como en Samaria, un poderoso avivamiento se desat� en Antioqu�a. Cientos o quiz�s miles aceptaron al Se�or.

�C�mo lograron ellos conservar esa Cosecha? "Lleg� la noticia de estas cosas a o�dos de la iglesia que estaba en Jerusal�n; y enviaron a Bernab� [quien era un ap�stol, Hechos 14:14] que fuese hasta Antioqu�a… En aquellos d�as unos profetas descendieron de Jerusal�n a Antioqu�a" (Hch 11:22, 27).

3) Ancianos Para Entrenar. Despu�s de esto, el patr�n a seguir era nombrar ancianos para que se ocuparan de alimentar, guardar y ministrar a las necesidades de los reci�n convertidos (lea Hechos 14:23; Tito 1:5).

Recuerde que en los tiempos del Nuevo Testamento hab�a jud�os devotos en todas las ciudades del imperio romano. Pablo visit� muchas de esas ciudades predicando el evangelio.

As� como Jes�s, Pablo tambi�n ir�a a las sinagogas (donde los jud�os devotos se congregaban para orar y para escuchar las ense�anzas del Antiguo Testamento), y ah� les predicaba Jes�s.

"Y recorri� Jes�s toda Galilea, ense�ando en las sinagogas …"

"Y llegados [Pablo y Bernab�] a Salamina, anunciaban la palabra de Dios en las sinagogas de los jud�os…" (Mt 4:23; Hch 13:5).

Por lo regular, esto resultaba en la conversi�n de muchos jud�os, quienes ya estaban muy bien ense�ados en las Escrituras. De �stos, con un m�nimo de entrenamiento y ense�anza, pudieron nombrarse los ancianos a las iglesias.

b. �frica Es Diferente. Pero en la Ghana del �frica Occidental en el a�o 1959, esto era diferente. La mayor�a de los conversos sab�an muy poco o tal vez nada acerca de la Biblia. El reto de levantar l�deres en la Iglesia en unas cuantas semanas para que supervisaran al reba�o de Dios no era una tarea f�cil.

Asumiendo que cada "anciano" fuera responsable de cien creyentes, se necesitar�an como 2,000 "ancianos" para cuidar de m�s de 200 mil creyentes que se convertir�an en diez semanas de una cruzada poderosa de evangelismo.

Pero cuando hay un ministerio apost�lico, siempre hay respuestas pr�cticas para la situaci�n. El ap�stol tiene un don de edificaci�n, �l sabe c�mo tirar el fundamento sobre el cual la Iglesia puede permanecer cimentada s�lidamente.

Por lo tanto, he aqu� lo que el ap�stol en Ghana hizo. �l propuso un plan simple para conservar la Cosecha de 200 mil almas. Este consisti� de lo siguiente:

1) Firmando Una Forma (Hoja de Papel). �l dise�� una forma sobre la cual los entrenadores firmar�an sus nombres, direcciones, ocupaciones y educaci�n o vocaci�n, etc.

2) Proveyendo Un Lugar. A fin de calificar para el entrenamiento de liderato en la iglesia local, el candidato para entrenador ten�a que estar capacitado para proveer un lugar (su propia casa o alguna alternativa) donde 75 � 100 personas pudieran congregarse para un servicio de la iglesia.

Aqu�llos que pudieran satisfacer esta calificaci�n, probablemente tendr�an cualidades de liderazgo naturales que podr�an ser desarrolladas.

En la sociedad de Ghana, para una persona poder tener un lugar donde acomodar tantas personas, usualmente significaba que tal individuo ten�a m�s propiedades materiales (dinero, bienes ra�ces, etc.) que la mayor�a. Si era as�, lo m�s probable ser�a que pudiera dirigir un grupo de personas.

3) Asistir A Un Seminario. A los entrenadores se les requer�a que asistieran a un seminario de entrenamiento los s�bados por la ma�ana, durante el per�odo de ocho semanas.

Cada cuatro horas de la sesi�n de entrenamiento, se presentar�a un estudio b�blico. Los entrenadores copiar�an el bosquejo del mismo en sus libretas de notas. El ap�stol se preparar�a y ense�ar�a esos estudios b�blicos a los futuros entrenadores.

T�picos tales como: C�mo dirigir a un pecador a Cristo, C�mo echar fuera un demonio, C�mo sanar un enfermo, C�mo preparar un serm�n o un estudio b�blico; todos �stos y m�s ser�an ense�ados.

Esto los preparar�a para la reuni�n del primer domingo despu�s que el evangelista se marche.

4) Provea Un Mapa. Se imprimieron mapas de la ciudad de Acra, Ghana, con el fin de identificar la ubicaci�n de cada edificio de la iglesia local dirigida por cada uno de los 2 mil que estaban bajo entrenamiento. Los servicios comenzar�an en tales ubicaciones el primer domingo despu�s de la conclusi�n de la cruzada el s�bado por la noche.

Se les dijo a las personas que asistieron a la cruzada: "La cruzada no concluir� cuando el evangelista se vaya. Continuar� en 2 mil localizaciones a trav�s de la ciudad en peque�os grupos de aproximadamente 100 personas.

El evangelio ser� predicado, los demonios echados fuera, los enfermos sanados y tiempos de adoraci�n gozosa ser�n disfrutados por todos los concurrentes a una de esas iglesias locales".

En la �ltima semana de la cruzada de diez semanas, las personas recibieron mapas e instrucciones sobre c�mo llegar a una de las iglesias locales el siguiente domingo en la ma�ana.

Cuando se recibi� la cuenta de parte de los dos mil l�deres de las iglesias locales, quienes reportaron los resultados y asistencia al ap�stol, se descubri� que m�s de 170 mil personas concurrieron a las iglesias locales el primer domingo despu�s que la cruzada concluy�.

Las ofrendas recibidas en esas iglesias locales, proveyeron respaldo financiero inmediato a los l�deres o pastores de dichas iglesias. A pesar de que Ghana es un pa�s pobre, no se necesit� dinero del extranjero para la obra.

Ese fue el comienzo de un movimiento que se extendi� por toda la naci�n de Ghana. Hoy, esa confraternidad tiene m�s de un mill�n de miembros en toda la naci�n y permanece firme en el Se�or.

2. Los M�todos Occidentales Muchas Veces No Funcionan
Este patr�n trabaja en la temporada de la Cosecha, durante la cual, nunca se tendr� el tiempo, dinero o personal necesarios para hacer las cosas de la misma manera en que las naciones occidentales las hacen. Los m�todos occidentales muchas veces no funcionan. Los siguientes son unos cuantos de los m�todos utilizados por el cristianismo occidental:

a. Retenidos En La Escuela. Ellos retienen de tres a quince a�os a los que son entrenados en las escuelas. �Cu�l es el resultado?

Para el tiempo en que la persona que recibe entrenamiento sale del mismo, sucede lo que dice Jerem�as 8:20: "Pas� la siega, termin� el verano, y nosotros no hemos sido salvos". La cosecha que no se recoge cuando est� madura, se pierde.

b. Lo Acad�mico Es Enfatizado. Dan demasiado �nfasis a lo acad�mico y muy poco al poder de Dios. Esto produce l�deres sin poder, sin vida, arrogantes, incompetentes e impr�cticos. Para la mayor�a de ellos, el seminario se convierte en un cementerio espiritual y pr�ctico (lea 1 Corintios 8:1).

c. Gastan Demasiado Dinero En Edificios. Edifican "establos muy lujosos para las ovejas", de los cuales, cada asiento en su santuario tiene un valor de 2 mil d�lares.
Dios, en Su misericordia, no otorg� esas sumas de dinero a los creyentes en la Iglesia del Nuevo Testamento, ni tampoco a la mayor�a de los creyentes en el mundo de hoy les dota de tanto dinero para que lo desperdicien de esa manera.

3. A La Manera B�blica
Durante la Fiesta de los Tabern�culos, los participantes utilizan caba�as de poco valor que sirven de residencia temporal, eso es tener sabidur�a. Nosotros vamos peregrinando por este mundo. Es vital que hagamos tesoros m�s all� del cielo azul, en el Cielo.

Por consiguiente, regresemos a la manera del Nuevo Testamento: acomodando a las ovejas en edificios modestos, en los hogares de los creyentes, donde sea posible y pr�ctico.

a. Iglesias Hogares, No Catedrales. Note lo siguiente:

1) La Iglesia Comenz� En Un Hogar. "Y de repente vino del cielo un estruendo como de un viento recio que soplaba, el cual llen� toda la casa" (Hch 2:2).

2) La Iglesia Creci� En Los Hogares. A medida que la Iglesia crec�a, continuaba utilizando los hogares.

"Y perseverando un�nimes cada d�a en el templo, y partiendo el pan en las casas, com�an juntos con alegr�a y sencillez de coraz�n" (Hch 2:46).

"Y todos los d�as, en el templo y por las casas, no cesaban de ense�ar y predicar a Jesucristo" (Hch 5:42).

3) Fueron Llenos Del Esp�ritu En Una Casa. El Ap�stol Pablo se convirti�, recibi� sanidad y fue bautizado con el Esp�ritu Santo en una casa.

"Fue entonces Anan�as y entr� en la casa, y poniendo sobre �l las manos, dijo: Hermano Saulo, el Se�or Jes�s, que se te apareci� en el camino por donde ven�as, me ha enviado para que recibas la vista y seas lleno del Esp�ritu Santo" (Hch 9:17).

4) Los Gentiles Comenzaron A Ser Salvos En Una Casa. La primera familia gentil en recibir el evangelio fue el resultado de la oraci�n del jefe de la familia.

"Entonces Cornelio dijo: Hace cuatro d�as que a esta hora yo estaba en ayunas; y a la hora novena, mientras oraba en mi casa, vi que se puso delante de m� un var�n con vestido resplandeciente" (Hch 10:30).

5) El Ap�stol Or� En Una Casa. El evangelio fue primero a los gentiles cuando el Ap�stol subi� a la azotea de una casa a orar.

"…Pedro subi� a la azotea para orar, cerca de la hora sexta" (Hch 10:9). All� recibi� una visi�n que produjo su partida para la casa de Cornelio: un Centuri�n Romano.

6) El Esp�ritu Santo Descendi� Sobre Los Gentiles Mientras Estaban En Un Hogar. El Esp�ritu descendi� por primera vez sobre los gentiles mientras estaban congregados en un hogar (en la casa de Cornelio), donde Pedro estaba predicando. "Y el Esp�ritu me dijo que… y entramos en casa de un var�n" (Hch 11:12). "Mientras a�n hablaba Pedro estas palabras, el Esp�ritu Santo cay� sobre todos los que o�an el discurso" (Hch 10:44).

7) Muchos Otros Ejemplos . El tiempo y el espacio no me permiten contarles acerca de la casa de Mar�a, la madre de Juan (Hch 12:12), de la casa del carcelero de Filipos (Hch 16:15-32), de la casa de Lidia, Jas�n y Crispo (Hch 16:40; 17:5; 18:8).

Adem�s, las ep�stolas est�n repletas de referencias sobre c�mo la Iglesia primitiva se extendi� de casa en casa.
Algunas de �stas son las de Felipe el evangelista; la casa de Pablo; las iglesias que estaban en las casas de Clo�, Est�fanas, Priscila y Aquila; Nimfas, Ones�foro, Filem�n y la dama elegida de 2 Juan (Hch 21:8; 28:30; 1 Co 1:11; 16:15, 19; Col 4:15; 2 Ti 1:16; Fil 2).

Esa es la manera b�blica. Es la menos costosa, la m�s pr�ctica y la soluci�n m�s efectiva de c�mo conservar y recoger la poderosa Cosecha que se festeja durante la Fiesta de los Tabern�culos (las caba�as temporales).

Este es el �nico patr�n operable para la mayor�a de las naciones en estos d�as de Cosecha sin precedentes. Casi todos los dem�s m�todos est�n destinados al fracaso, especialmente el m�todo utilizado por las naciones occidentales: el de edificar catedrales lujosas para acomodar a las ovejas.

En el libro de Apocalipsis, leemos una descripci�n de esta Cosecha como una temporada, en la cual, la Esposa es ataviada (Ap 21:2). Por supuesto que todo esto es antes de Su venida por una Iglesia gloriosa (Ef 5:27).

C. EL ASPECTO PERSONAL
La Fiesta de los Tabern�culos puede ser experimentada ahora, antes de la Segunda Venida de Jesucristo.

He asistido a avivamientos evangel�sticos en varias naciones que ya conocen algo acerca del esp�ritu de la Fiesta de los Tabern�culos.

1. Avivamiento En Argentina
Mientras visitaba Argentina, Am�rica del Sur, estuve muy consciente de la poderosa presencia de Dios sobre esa naci�n. Observ� c�mo creyentes de diferentes denominaciones se congregaban en un auditorio que apenas ten�a asientos para acomodar a 1,800 personas.

Ellos comenzaban levant�ndose en unanimidad para adorar al Se�or. La adoraci�n en alabanzas celestiales y saturadas del poder del Esp�ritu, hac�an que la presencia de Dios llenara todo el lugar.

La gloria de Dios era sentida tan poderosamente que me preguntaba si en realidad estaba sentado en el piso o no. Mir� hacia m� alrededor para confirmar si en verdad lo estaba. Me sent�a como si estuviera literalmente flotando y ascendiendo hacia el Cielo.

Los pecadores se salvaban, los enfermos se sanaban y otros eran bautizados con el Esp�ritu Santo mientras los santos adoraban. Aquello era algo m�s sublime que los Dones del Esp�ritu en operaci�n; era Dios Mismo manifest�ndose en aquel lugar.

Esto era un cumplimiento espiritual de la Escritura: "He aqu� el tabern�culo de Dios con los hombres, y �l morar� con ellos; y ellos ser�n su pueblo, y Dios mismo estar� con ellos como su Dios…" (Ap 21:3).

El Se�or abri� mis ojos espirituales para ver que est�bamos experimentando el gozo y maravilla descubierta en el Festival de los Tabern�culos.

La Fiesta de los Tabern�culos es experimentada por la gloriosa y magna presencia del Mismo Dios que desciende para estar entre Su pueblo. Su presencia era tan esplendorosa en Argentina que muchos sintieron liberaci�n de horribles ataduras y prisiones de oscuridad.

Una poderosa libertad y hermoso orden, saturaban el ambiente. En una esquina cincuenta personas, abraz�ndose entre s�, danzaban en el Esp�ritu. En otra �rea, un grupo lloraba y se abrazaban mutuamente. El amor de Dios lo conquistaba todo.

Las divisiones del hombre no pod�an resistir la presencia de Dios.

Otras tres caracter�sticas identificaban este avivamiento. La primera, era el tremendo amor de Jes�s. La segunda, era la convicci�n de que Cristo es realmente el Se�or. La tercera, era el concepto de que el Se�or est� edificando una sola Iglesia, y que todos los creyentes deben estar en confraternidad los unos con los otros.
Los l�deres reconoc�an que la Iglesia se estaba congregando en cientos de lugares bajo toda clase de nombres, pero en realidad S�LO HAB�A UNA Iglesia, de la cual, el Mismo Jes�s era el constructor.

Debido a esto, el liderato de la Iglesia en Buenos Aires, Argentina, se congreg� (bajo la unci�n del Esp�ritu) en comuni�n y unidad amorosa, los cuales, atravesaron todas las barreras denominacionales.

Un grupo de Bautistas se un�a con un grupo de Pentecostales y Presbiterianos y adoraban juntos. Era algo glorioso.

2. Avivamiento Y La Fiesta De Los Tabern�culos
El avivamiento asociado con la Fiesta de los Tabern�culos tiene su precedente en la Biblia. Uno de los relatos m�s fascinantes est� en los Libros de Nehem�as y Esdras. Este relato describe la visita de Dios a Su pueblo con un poder majestuoso, durante la Fiesta de los Tabern�culos.

"Al d�a siguiente se reunieron los cabezas de las familias de todo el pueblo, sacerdotes y levitas, a Esdras el escriba, para entender las palabras de la ley.

Y hallaron escrito en la ley que Jehov� hab�a mandado por mano de Mois�s, que habitasen los hijos de Israel en tabern�culos en la fiesta solemne del mes s�ptimo" (Neh 8:13, 14).

"Bendijo entonces Esdras a Jehov�, Dios grande. Y todo el pueblo respondi�: �Am�n! �Am�n! alzando sus manos; y se humillaron y adoraron a Jehov� inclinados a tierra.

Y los… hac�an entender al pueblo la ley; y el pueblo estaba atento en su lugar...

"porque todo el pueblo lloraba oyendo las palabras de la ley.

Luego les dijo: Id, comed grosuras, y bebed vino dulce, y enviad porciones a los que no tienen nada preparado; porque d�a santo es a nuestro Se�or; no os entristezc�is, porque el gozo de Jehov� es vuestra fuerza.

Los levitas, pues, hac�an callar a todo el pueblo, diciendo: Callad, porque es d�a santo, y no os entristezc�is.

Y todo el pueblo se fue a comer y a beber, y a obsequiar porciones, y a gozar de grande alegr�a, porque hab�an entendido las palabras que les hab�an ense�ado" (Neh 8:6-12).

"Celebraron asimismo la fiesta solemne de los tabern�culos… pusieron a los sacerdotes vestidos de sus ropas y con trompetas, y a los levitas hijos de Asaf con c�mbalos, para que alabasen a Jehov�, seg�n la ordenanza de David rey de Israel.

Y cantaban, alabando y dando gracias a Jehov�, y diciendo: Porque �l es bueno, porque para siempre es su misericordia sobre Israel. Y todo el pueblo aclamaba con gran j�bilo, alabando a Jehov� porque se echaban los cimientos de la casa de Jehov�.

Y muchos de los sacerdotes, de los levitas y de los jefes de casas paternas, ancianos que hab�an visto la casa primera, viendo echar los cimientos de esta casa, lloraban en alta voz, mientras muchos otros daban grandes gritos de alegr�a.

Y no pod�a distinguir el pueblo el clamor de los gritos de alegr�a, de la voz del lloro; porque clamaba el pueblo con gran j�bilo, y se o�a el ruido hasta de lejos" (Esd 3:4, 10-13).

�Podemos creer, para volver a ver los d�as de avivamiento como los descritos en nuestra Biblia? �Se�or, env�a la lluvia del avivamiento! �Env�a diluvios sobre tierras del desierto! Estamos sedientos; Se�or, vis�tanos, te lo suplicamos en oraci�n. AM�N.

3. Tiempo De Regocijarnos
La Fiesta de los Tabern�culos es una temporada de gran regocijo. Tenga cuidado cuando critique a los que oran, adoran y alaban al Se�or con gran emoci�n. Eval�e tal adoraci�n con cuidado y correctamente.
El verdadero regocijo en Dios tiene que ser espont�neo y exuberante. Por supuesto que es normal que haya exclamaciones de gozo, danzas y risas. �Recuerda usted la entrada triunfal de Cristo y el gozo espont�neo y alabanzas ruidosas del pueblo?

"…toda la multitud de los disc�pulos, goz�ndose, comenz� a alabar a Dios a grandes voces por todas las maravillas que hab�an visto.

Entonces algunos de los fariseos de entre la multitud le dijeron: Maestro, reprende a tus disc�pulos. �l, respondiendo, les dijo: Os digo que si �stos callaran, las piedras clamar�an." (Lc 19:37, 39, 40).

4. Un Tiempo De Informalidad
Como hemos declarado en innumerables ocasiones, la Fiesta de los Tabern�culos toma lugar en caba�as hechas como lugares de refugio temporales.

Los creyentes se est�n uniendo temporalmente por todo el mundo en conferencias de renovaci�n a menudo al aire libre o en auditorios p�blicos. Es evidente que hay una mayor libertad para los santos fuera de las paredes de sus iglesias (las cuales a menudo son ritualistas, lit�rgicas y sin vida).

Muchos santos consagrados que se ven reprimidos y cohibidos en sus iglesias, sienten la necesidad de ir a una convenci�n o conferencia donde puedan celebrar la grandeza de Dios.

Esa celebraci�n liberadora toma lugar muy f�cilmente en esas reuniones de corto plazo. Al parecer es m�s f�cil estar libre en esos lugares que en la atm�sfera conservadora de algunas iglesias.

En el cap�tulo 8 de Nehem�as, hay un relato de la celebraci�n de los Tabern�culos. Ellos encontraron escrito en la ley que deber�an celebrar los Tabern�culos con ramas de �rboles.

Los �rboles son mencionados en Isa�as 61:3 como "�rboles de justicia".

Hay diversas clases de �rboles envueltos en la construcci�n de los refugios temporales.

Quiz�s eso nos habla de las muchas y diversas denominaciones que estar�an representadas en los Tabern�culos.

El fen�meno moderno de congregarse en el Esp�ritu Santo para las conferencias de renovaci�n, a menudo es lo que pone en libertad ese esp�ritu de los Tabern�culos.

Muchos l�deres de iglesias no se sienten capacitados para identificarse con tales conferencias. Pero nosotros no podemos impedir que tomen lugar. Estas son parte del plan final de Dios. Est�n proveyendo alimentos espirituales para muchas almas hambrientas y liberaci�n espiritual a los que est�n atados.

Es casi imposible mantener a las ovejas lejos de un campo lleno completamente de pastos verdes. Si las almas no reciben alimento espiritual donde est�n, entonces, marchar�n hacia otros lugares donde puedan conseguirlo.

Muchas vidas est�n tan hambrientas por la Palabra de Dios, que viajar�n cientos de millas para acudir a una celebraci�n de los Tabern�culos.

Aunque no estoy de acuerdo con todo lo que est� sucediendo en algunas conferencias, s� entiendo que hoy Dios est� haciendo algo nuevo que est� atrayendo a Su pueblo a la unidad.

5. Un Indicador Aut�ntico
Creo que en esas conferencias habr� un indicador aut�ntico que demuestre a los concurrentes si tienen o no el sello de la aprobaci�n divina.

Nehem�as 8:9-10 enfatiza una palabra prof�tica durante la fiesta de los Tabern�culos.

"D�a santo es a Jehov� nuestro Dios… Id comed grosuras, y bebed vino dulce, enviad porciones a los que no tienen nada preparado".
Esta Comisi�n es parte del esp�ritu de los Tabern�culos. Dios dice: "…Id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura" (Mr 16:15).

La Fiesta de los Tabern�culos nos comunica ese sentido de responsabilidad y cuidado desinteresado que es parte esencial del Esp�ritu de Jes�s. �Se abrazar� usted a tal responsabilidad en conjunci�n con la bendici�n que acarrea? �nicamente entonces podr�a celebrar una Fiesta de los Tabern�culos genuina y aut�ntica. Cualquier otra cosa tendr� todos los elementos de sinceridad ego�sta.


.::2do Trimestre - .::SECCI�N C